lunes, 30 de octubre de 2017

Déjame al menos soñarte

Déjame al menos soñarte,
ya que la realidad
me ata el corazón
con las cadenas del silencio,
y en la oscuridad
se ha cernido sobre mí
la melancolía de tu recuerdo.
Déjame al menos soñarte,
y que el letargo de las brumas de lo incierto
arrastre esta alma
hasta la candidez angelical de tu mirada.
Déjame al menos soñarte
hasta que la luz de la mañana,
con su halo de desesperante dulzura,
siga recordándome a ti.

Macarena Díaz Monrové