miércoles, 9 de septiembre de 2020

Qué lejos...


Qué lejos…

Qué lejos está de mí…

Tanto como la felicidad…

Qué lejos su mundo, sus ilusiones,

sus sueños, ya siempre lejos de mí…

Qué lejos y qué adentro este dolor

de saber que pese a todo,

nuestras tercas almas son solo una…

Viento, tú que acaricias sus mañanas,

cuida de sus manos de libertad,

de sus ojos como el mar rompiendo en el cielo,

de sus labios de ansia y locura,

cuida de sus pasos y su camino,

cuida de su fantasía, de su vida,

cuida de su alma que lleva a su lado

también la mía…

y haz que nunca me olvide…

Cuida, viento, de quien es todo para mí… 


Macarena Díaz Monrové



martes, 1 de septiembre de 2020

La primera vez que te soñé

 

La primera vez que te soñé

dibujé tu alma

con tinta de noche y oración

y desde el cielo bajó el alba

para ver en mis ojos

el insomnio regado

de miedo e ilusión…

La primera vez que te soñé

nació de mi pecho

un mundo de ilusión y pesadilla,

cielo e infierno, paz, sombras…

La primera vez que te soñé

fuiste mundo, fuiste todo,

fuiste rugido de vida…

¡Incansable palabra del alma!


Macarena Díaz Monrové



martes, 18 de febrero de 2020

A Gustavo Adolfo Bécquer

A Gustavo Adolfo Bécquer en el 184 aniversario de su nacimiento:
Entre la luminiscente niebla de la ciudad amada,
el más bello día de febrero, naciste tú…
Y la poesía ese día vino a besarte las manos,
a susurrar a tu alma
que el olvido jamás te habitaría…
Entre campanillas azules y gorriones
que picoteaban rimas en tus ventanas,
en el etéreo canto de las aguas del río,
por el encaje de La Giralda
se trenzaban las artes, y la poesía
tañía en las campanas que parecían
subir hasta el cielo para que cayeran en cascadas
las gracias por haber nacido
quien a tantas almas acariciaría…
Gustavo, un día aquí naciste tú,
puedo verte entre la opalescente bruma
en la que tu alma de ángel
se desdibuja para ser una vez más
ese niño que jugaba en la plaza y
recorría las calles de Sevilla
hasta la orilla del río, tu río…
Aquí, Gustavo, donde naciste
puedo sentir tu alma una vez más,
como un sueño de niebla
que a mi alma desborda …
y eres tú,
tú,
inundando de poesía
¡el aire que tu ciudad respira!

Macarena Díaz Monrové




sábado, 15 de febrero de 2020

El amor



Entre el agua he ido a buscarte,
serena claridad de tu azul marea.
Entre el aire he sucumbido a tu aroma,
a la tibia sal que deja tu silencio en mis heridas.
Entre el fuego he dibujado tu nombre,
queriendo dar al olvido
lo que nació para ser eterno y nunca mío.
Te he buscado sin hallarte en valles, cascadas,
entre las sombras o entre la niebla…
Y solo te he encontrado dentro de mí,
cuando el mundo derrotado ha caído a mis pies,
cuando he sentido que siempre he tenido
su luz en el vaivén de esta soledad,
cuando ya solo puedo retener su recuerdo
y estar tan lejos de su realidad…

Macarena Díaz Monrové